La Asociación de Directores de Agencias Cinematográficas Europeas (EFAD) ha declarado estar «profundamente decepcionada» con las conclusiones del dictamen de PACE, que, en su opinión, despoja de su espíritu original al Proyecto de Convenio del Consejo de Europa para promover la coproducción de obras audiovisuales en formato serie.
Según EFAD, este informe contradice los objetivos esenciales del citado Convenio, al enmarcarlo como un instrumento económico y de competitividad, y afectará negativamente la capacidad del sector de la producción independiente.

«El Convenio no es una herramienta reguladora ni un instrumento de competitividad, sino un marco voluntario que apoya la diversidad cultural y las coproducciones, donde los productores independientes asumen los mayores riesgos», aseguran desde EFAD. «Su objetivo original es garantizar un reparto equitativo del valor que evite la concentración excesiva de derechos y permita a los productores crear catálogos de propiedad intelectual sostenibles. En el panorama mediático actual, estas salvaguardias son esenciales para reequilibrar el poder de negociación para con las grandes empresas.»
El dictamen adoptado por la Comisión de Cultura, Ciencia, Educación y Medios de Comunicación y por PACE elimina del Convenio las condiciones de elegibilidad que:
- Limitan al 30 % la participación en la coproducción de países no miembros.
- Aclaran la definición de productor independiente de acuerdo con la legislación.
- Garantizan que las contribuciones técnicas y artísticas de los productores independientes se tengan debidamente en cuenta.
- Protegen la conservación de los derechos de propiedad intelectual por los productores independientes para que se beneficen de la explotación de sus obras.
Estas disposiciones pretendían, en palabras de EFAD, fortalecer la vitalidad del sector europeo, en beneficio de la diversidad cultural, así como de los productores independientes que participan en dichas coproducciones, permitiendo al mismo tiempo que los proveedores de servicios de comunicación también participen de ellas, tanto desde la perspectiva creativa como de la inversión. «En ningún caso el Convenio impide la participación de broadcasters y plataformas en el desarrollo y la explotación de las obras», apuntan.
«La eliminación de estas disposiciones socava la sostenibilidad y el desarrollo del sector que el Convenio pretende apoyar, ya que amplía su ámbito de aplicación a obras en las que los productores se limitan a ser proveedores de servicios, abriendo el acceso al Convenio y a la financiación pública a los grandes operadores no europeos«, añaden.
Contrariamente a lo que se afirma en el dictamen, EFAD sostiene que el Convenio no interfiere con la legislación nacional ni europea; respeta claramente las definiciones nacionales, mientras que la propuesta del dictamen de PACE de imponer nueva legislación nacional va más allá y contradice los principios del Consejo de Europa.
«Las solicitudes de una evaluación de impacto ignoran las extensas negociaciones ya celebradas y el objetivo inicial del Convenio: no es una herramienta de regulación del mercado, sino un instrumento de diversidad cultural que apoya a quienes se encuentran en mayor riesgo en el proceso creativo y garantiza que el público se beneficie de un flujo diverso de series con producción europea«, concluyen desde la asociación.
Por tanto, la EFAD insta al Consejo de Europa a preservar la ambición original de la Convención: empoderar a los productores independientes, salvaguardar la diversidad cultural y garantizar una colaboración justa y sostenible entre los diferentes actores.



