‘Frontera’, de Judith Collel, una producción que reivindica la memoria histórica y la diversidad lingüística como ejes centrales

‘Frontera’, la nueva película de Judith Colell (‘Elisa K’), ha sido presentada en la 70ª edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) donde compite por la Espiga de Oro como una producción que reivindica la memoria histórica y la diversidad lingüística como ejes centrales.

‘Frontera’ se desarrolla en 1943 y recupera la historia poco conocida de un grupo de habitantes de un pueblo de los Pirineos, quienes desafiaron las normas del franquismo para salvar a cientos de refugiados que llegaban de Francia escapando del régimen nazi. Un relato que refleja la realidad de 45.000 personas que pusieron sus vidas en riesgo para llegar a la costa atlántica y buscar nuevos horizontes en el continente americano.

Se trata de una obra que combina drama histórico y mirada territorial, rodada íntegramente en localizaciones del Pallars con especial atención al contexto sociolingüístico de la época.

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Siendo una coproducción de España y Bélgica en la que participan Coming Soon Films, Diagonal (Banijay Iberia) y Bulletproof Cupid, la película cuenta además con apoyo del ICEC, del ICAA, Screen Flanders (una iniciativa de VLAIO en colaboración con VAF), el Tax Shelter del Gobierno Federal Belga y BNP Paribas Fortis Film Finance, MEDIA y con la participación de RTVE y 3Cat. La distribución en cines será a cargo de Filmax.

Judith Colell, directora y presidenta de la Academia del Cine Catalán, junto con los guionistas del filme Miguel Ibáñez Monroy y Gerard Giménez, construyen este largometraje inspirado en historias reales, que logró 1,2 millones de euros en el segundo procedimiento de ayudas generales del ICAA del año 2023.

La producción de ‘Frontera’ fue presentada como un proyecto que se articula desde la memoria histórica y el compromiso con la diversidad lingüística. Gervasio Iglesias, subdirector de cine de RTVE, ha afirmado que la corporación está apostando por recuperar relatos vinculados a la memoria democrática y señaló que “es muy interesante que conozcamos nuestras historias y que los que tenemos la herramienta para ponerla a disposición del público se las dé y que a partir de ahí cada uno juzgue”, y añadió que muchas veces “la historia se cuenta con un trazo muy grueso” y que ‘Frontera’ propone precisamente una mirada “microscópica” centrada en personajes anónimos y en la dimensión cotidiana de los hechos.

Ha resaltado que “estamos apoyando muchos proyectos que recuperan nuestra historia más reciente, también desmarcados dentro de la memoria democrática y muchos proyectos que ya tenemos en marcha que nos hacen mucha ilusión y por lo tanto, vamos a continuar en esta línea y también en la que estamos potenciando muchísimo de las películas en lenguas oficiales del Estado Español para mostrar la diversidad cultural, lo cual es muy bonito y puede verse en esta película”.

Marta Ramírez, de Coming Soon Films, ha referido que el origen de la película está en un artículo periodístico que relataba un caso real ocurrido en el Pirineo, donde una familia ayudó a personas perseguidas durante la Segunda Guerra Mundial, lo que llevó a desarrollar la ficción a partir de un episodio poco conocido la historia reciente de España y subrayó que el interés del proyecto reside en la posibilidad de narrar “muchas capas humanas” a través de los personajes.

Jordi Frades, director general en Diagonal TV, por su parte, remarcó que su papel como productor se basa en proteger la mirada creativa de la directora. “Mi función en el proyecto realmente, en mi caso, siempre hago lo mismo cuando ejerzo de productor es proteger lo que quiera hacer quien dirige, en este caso Judith, y he acompañado desde la confianza y el respeto al territorio artístico del equipo para que ella contara la historia que quería hacer llegar al espectador”.

Un thriller de época con documentación histórica exhaustiva

Sobre su incursión por primera vez en un género como el thriller de época, la directora ha comentado que “no había hecho época antes ni había tenido un presupuesto tan grande; para las mujeres siempre es más complicado acceder a estos espacios y, por ello, suelo hacer películas más intimistas por lo que se trataba de salirme de mi zona de confort, pero era una historia que sentía que merecía ser contada porque dialoga mucho con el presente”.

Colell ha señalado que uno de los retos más grandes fue el trabajo de documentación ya que no hay tanto escrito sobre el tema, “pero sí que encontré artículos y libros que hablan de los pasadores, todo ese material fue muy interesante, descubrí historias fascinantes de personas, algunas incluso cercanas a la familia Franco, que ayudaban a la gente a huir de los nazis”.

Además, ha exaltado la labor del equipo artístico en departamentos como el diseño de vestuario, la dirección de arte, el diseño sonoro o la fotografía, en aras de lograr una ambientación idónea. “Jugamos con la oscuridad de esa época, tanto literal como simbólica, en esa zona a veces no tenían luz eléctrica y esto iba muy bien para representar el miedo, ese estado constante de alerta y amenaza, de no saber qué está pasando en el propio pueblo ni quiénes vienen del otro lado de la montaña; era un trabajo con lo que vemos y no vemos, lo que oímos y no oímos”.

Judith Colell (directora), Miki Esparbé, Asier Etxeandía, María Rodríguez Soto (actores), Marta Ramírez, Jordi Frades, Gervasio Iglesias y Angélica Rubio. Foto: PHOTOGENIC.

Colell ha definido a este pueblo de los Pirineos como un pequeño microcosmos, que plantea un puente interesante con las actitudes que asume el ser humano ante el horror en el mundo contemporáneo. “Hay gente que quiere denunciar y ayudar sin dudarlo, pero también hay una zona gris con aquellas personas que quizás en un principio miran hacia otro lado, pero luego se dan cuenta de que tienen que ayudar también, aunque eso signifique poner sus vidas en peligro”.

Los intérpretes destacan el trabajo desde la contención

El retrato de ese estado de alerta también se logró, en gran parte, gracias al trabajo interpretativo. A propósito, Miki Esparbé, quien lidera el elenco junto a María Rodríguez Soto, ha manifestado que los personajes viven con un miedo latente, pero entienden que ayudar no es una opción, sino que es su naturaleza, su forma de entender la vida. Es bonito ver el acercamiento entre este matrimonio y entender sus gestos de cariño, las miradas compartidas, como una extensión de la necesidad compartida de hacer el bien”.

Para el actor, la película es un llamado a la acción en tiempos de barbarie y, al mismo tiempo, es un mensaje de esperanza pues gracias a gente como la de este pueblo se han salvado y siguen salvando muchas vidas.

Una idea que comparte Asier Etxeandíacuyo personaje en ‘Frontera’ es uno de los más complejos. “No puedo decir mucho de mi personaje porque sería un spoiler, así que solo diré que lo interesante de los seres humanos, lo más bonito de todos, es que nada es lo que parece. Todos somos víctimas de una guerra, da igual el bando en el que estés”.

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