La Academia de Cine ha equipado la sala de proyecciones de su sede madrileña con tecnología de sonido envolvente Dolby Atmos. Con esta reforma, la institución busca ofrecer a los espectadores una experiencia inmersiva y de calidad, al tiempo que reivindica el papel del sonido en la narrativa audiovisual.
El acto, celebrado el pasado 30 de mayo, fue presentado por Fernando Méndez-Leite, presidente de la Academia de Cine, en compañía de Juan Ferro y Cristian Amores, miembros de la comisión de sonido en la Junta Directiva de la Academia. Tras una introducción a cargo de Ricardo Viñas, consultor senior de sonido en Dolby, tuvo lugar una mesa redonda con profesionales del sector.

«Creo que el perfeccionamiento del sonido es una de las claves que explican la mejora, en términos de calidad, que ha vivido el cine español en los últimos años, y que lo han situado a la altura de Europa a nivel técnico», aseguró Méndez-Leite. «La sala con la mejor programación de España tiene que tener un sonido acorde, y qué mejor sistema que Dolby Atmos«, apuntó Juan Ferro, quien definió las obras como «muy complejas.»
«Dolby Atmos es, desde 2012, sinónimo de máxima calidad a un precio ajustado«, subrayó Viñas. «Su elemento diferencial más importante es la tridimensionalidad de la que dota al sonido, gracias a la instalación de altavoces en los techos y a un sistema basado en objetos, y no en canales, siempre en busca de la máxima optimización. En el caso de la nueva sala de la Academia, estamos hablando de 48 fuentes sonoras distintas, lo que va a aumentar el impacto emocional de las historias que aquí se muestran. El sonido nos emociona más que la imagen, y lo que hacemos, desde Dolby, es dar herramientas a los creadores. En definitiva, poner la técnica al servicio del arte.»
La importancia del sonido en la experiencia cinematográfica
Además de los propios Viñas y Ferro, intervinieron en este coloquio la compositora Vanessa Garde; el mezclador y productor Mikel Fernández Krutzaga; el diseñador de sonido y mezclador Gabriel Gutiérrez; y Esther Gómez, CEO de Best Digital.
Según Juan Rulfo, «esa frase tan manida de ‘esto lo arreglamos en postpo’ debe quedar desterrada para siempre de la industria. Y para ello, creo que todavía hace falta tiempo, y también educación, tanto de los espectadores como de los propios profesionales.»
«Dentro de una producción, el sonido se trabaja cada vez desde fases más tempranas. Existe el interés de escritores, directores y productores, en que aportemos ideas, ya desde la fase de guion, y es que el sonido no es solo técnica, sino que tiene una parte artística a la hay que dar un mayor valor. Como diseñador de sonido, mi trabajo es decidir cómo narrar una historia y crear sensaciones por medio del sonido, que tiene un lenguaje propio», comentó Gabriel Gutiérrez, diseñador de sonido de ‘El llanto’. «Todo buen trabajo de sonido tiene fuerza, pero pasa desapercibido, y eso es bueno, porque, si todas las piezas encajan y se compensan, quiere decir que el conjunto funciona», concluyó.
En palabras de Mikel Fernández Krutzaga, «en relación a la imagen, el conocimiento sobre sonido sigue siendo muy limitado, aunque todo ha cambiado mucho desde la era analógica. Actualmente, un proyecto de gran tamaño puede tener entre 400 y 500 pistas de audio, y el objetivo es valernos de la tecnología para recrear el sonido de la naturaleza. A fin de cuentas, hablamos de utilizar el espacio para tratar de imitar la realidad.»
«El sonido es una parte indisociable del storytelling, hasta el punto de que yo siempre digo que la música es el tercer guion de una película, una tercera herramienta para decir aquello que no se ha dicho, después de la versión escrita y la de montaje», afirmó Vanessa Garde, autora de la banda sonora de ‘Llegaron de noche’. «En este sentido, Dolby Atmos nos permite ir mucho más allá a la hora de jugar con los distintos elementos. Este sistema da alas a la creatividad y ha cambiado mucho mi manera de trabajar.»

Y es que, según repasó Ricardo Viñas, España cuenta ya con 190 salas Dolby, lo que le convierte en el tercer país con mayor presencia de este sistema a nivel europeo. Pero, en relación a su población, nuestro país es el segundo del mundo con mayor número de pantallas Dolby, y el primero si se cuentan las salas Atmos que tiene cada complejo con tecnología Dolby: «Los exhibidores buscan diferenciarse para sobrevivir en el negocio, y apostar por el sonido de calidad es una de las fórmulas para lograrlo, ya que, además, el retorno económico y la amortización de la inversión están asegurados. En lo que tenemos que trabajar, en este momento, es en educar a las nuevas generaciones para que se den cuenta de que el sonido de un móvil no tiene nada que ver con el de un cine.»
«La mezcla de sonido es fundamental a la hora de transmitir lo que queremos que el espectador sienta, y Dolby Atmos es el mejor modo de conseguirlo», sentenció Esther Gómez, CEO de Best Digital. «Hay clientes que todavía no se lanzan a utilizar este sistema, quizás por una mezcla de falta de presupuesto, desconocimiento o miedo al cambio, pero de lo que no hay duda es que todo el que lo prueba, repite. Muchos directores creen que Atmos es un sistema pensado para las grandes películas de acción, pero no es así, y de hecho, cada vez más proyectos optan por esta tecnología en España. Y no solo porque suenan mejor, sino porque Atmos abre muchas puertas de cara a las ventas internacionales y esas películas se proyectan en las mejores salas.»
Antes de poner fin a la conversación, los participantes se aventuraron a predecir la senda por la que discurrirán las futuras innovaciones en el terreno del sonido, fruto de la tensión entre creatividad y hábitos de consumo. Todos ellos coincidieron en señalar el salto de las últimas tecnologías al ámbito doméstico y su estandarización más allá del cine, la introducción de nuevas convenciones narrativas y la posibilidad de que los espectadores puedan disfrutar en igualdad de condiciones de la experiencia cinematográfica en su faceta sonora, independientemente de su posición dentro de la sala.
Dolby Atmos es una tecnología que proporciona un sonido que viaja por la sala con un realismo asombroso y envuelve al público para transportarlo al corazón de la acción.




