La Filmoteca Valenciana inicia una nueva temporada en su sede del edificio Rialto con la renovación de su equipamiento técnico. A partir del viernes, 12 de septiembre, la sala Berlanga de la Filmoteca contará con un proyector compacto de última generación, compatible con todos los formatos de cine digital, que utiliza un dispositivo multiláser que mejora la calidad y uniformidad de la imagen en cuanto a brillo, contraste y color.
El nuevo proyector cuenta con una tecnología de luz láser RGB puro que ofrece un contraste de 6.000:1 y una resolución de imagen 4K, cuatro veces superior al del equipo anterior, con lo cual las proyecciones tendrán una imagen más detallada, nítida y con mayor profundidad de color. Además, el nuevo equipo permite la reproducción de hasta 120 fotogramas por segundo, cifra muy por encima de la convencional.
La sala Berlanga estará equipada con un nuevo sistema de reproducción 3D de alta tecnología, y gafas activas de recarga de eficiencia lumínica. En cuanto al equipo de sonido, pasa de un Dolby Digital 5.1 a un Dolby Surround 7.1, con vistas a Dolby Atmos.
Asimismo, este nuevo proyector tiene un consumo eléctrico muy reducido en comparación con el proyector que estaba en funcionamiento hasta ahora. Según las estimaciones técnicas, el consumo de electricidad se verá reducido en un 75 % anual.
También se reducirán los gastos de mantenimiento, ya que la fuente de luz utilizada tiene una duración superior a las 50.000 horas. El anterior proyector utilizaba lámparas xenón que generaban mucho calor, con una duración limitada a 1.000 horas.
Inicio de la temporada
La nueva temporada de la Filmoteca Valenciana comenzará con la proyección el viernes 12 de septiembre, a las 18:00 horas, del clásico del cine polaco ‘El manuscrito encontrado en Zaragoza’ (1964), dirigido por Wojciech Jerzy Has.
El sábado 13, a las 18:00 horas, empezará un ciclo dedicado al actor italiano Marcello Mastroianni con la proyección de la comedia ‘Rufufú’ (1958), de Mario Monicelli. Ese mismo sábado, a las 20:00 horas, se inaugurará otro ciclo sobre el cine checo de los sesenta de la mano del drama histórico ‘La trampa del diablo’ (1961), de Frantisek Vlácil.
