‘Bohemian Rhapsody’ – estreno en cines 31 de octubre

La vida de Freddie Mercury.

Han pasado más de 25 años desde la muerte del extravagante líder y voz principal de Queen, Freddie Mercury y la música perdura. Freddie redefinió y trascendió los estereotipos, de la misma manera que la música de Queen rehúsa ser etiquetada dentro de cualquier género tradicional. Quizá sea esta la razón por la cual el grupo es un fenómeno tan intergeneracional, multicultural y global.

Rami Malek (‘Mr. Robot’) se enfunda en un ajustado mono y coge el pie de micrófono para interpretar al rey del pop-rock en ‘Bohemian Rhapsody’, una contagiosa celebración llena de ritmo y corazón de la música de Queen y de la extraordinaria vida de su vocalista, Freddie Mercury.

La película empieza y termina con la icónica actuación de Queen en el Live Aid. Live Aid fue uno de los acontecimientos culturales más importantes de los años 80, reuniendo a las mayores estrellas del firmamento en un concierto benéfico en dos escenarios: el estadio de Wembley en Londres y el estadio John F. Kennedy en Filadelfia, el 13 de junio de 1985. Organizado por Bob Geldof y Midge Ure para recaudar fondos para los afectados por la hambruna en Etiopía, el concierto fue una de las mayores transmisiones por satélite de todos los tiempos, seguido por mil millones novecientas mil personas en 150 países del mundo.

- Publicidad -

La decisión de terminar la historia con esa actuación en directo tuvo perfecto sentido para el productor Graham King y el equipo. El concierto llegó en un punto de inflexión ya que reunió a la banda tras partir Mercury a Alemania, donde grabó dos discos en solitario. También llegó cuando Mercury estaba en su momento menos productivo, bajo la influencia de Paul Prenter, rodeado de vividores que se aprovechaban de su generosidad y cayendo en una espiral descendente de abuso de drogas y alcohol.

Encontrar los actores indicados para dichos papeles fue una experiencia abrumadora, especialmente para el papel de Freddie Mercury: no solo tendría el actor que ser capaz de transmitir la complejidad emocional de Mercury sino, dadas las numerosas recreaciones de las actuaciones en directo de Queen durante la película, debía entender de movimiento y danza, primordiales para la puesta en escena del cantante.

Graham King describe el viaje emocional de Mercury a lo largo de su vida, “Freddie era un tipo que no creía en nada. Era un luchador. No era fácil ser inmigrante en UK en esos días. No se volvió una estrella de inmediato ni gozó de éxito de la noche a la mañana. Lo consiguió a través de la lucha, rechazando el ‘no’, evitando la negatividad y respondiendo a los golpes con algo mayor y mejor. Es lo que Queen logró mejor en su música. Cada vez que pensabas haber escuchado lo mejor, llegaba otra canción que te descolocaba”.

Rami Malek, ganador del Emmy, nacido en Los Ángeles, estrella de la serie de televisión ‘Mr. Robot’, fue el actor escogido por King y los realizadores para meterse en los zapatos de Mercury. Malek era fan de su música y le emocionó la oportunidad de descubrir más de este icono musical. “Yo sabía que Queen era enorme y que Freddie Mercury era un ícono y héroe para muchos”, dice Malek. “Pero creo que no entendía del todo cuán importante es para tanta gente alrededor del mundo. La base de fans de Queen es enorme. Siempre fui admirador de Queen y Freddie Mercury, pero, solo cuando empecé a investigar fue que aprendí que empezaron en 1970 cuando todos tenían el pelo largo, se pintaban las uñas de negro y llevaban atuendos escandalosos. Creo mucha gente identifica a Freddie como el hombre musculoso y bigotudo de cabello corto que llevaba camisetas de tirantes y adoptaba cierta actitud bravucona y machista. Fue sorprendente llegar a conocer sus distintas caras y su lado más dulce también”.

Los temores de Malek sobre asumir tan icónico papel pronto desaparecieron.

“Cuando te dispones a interpretar a Freddie Mercury te preguntas cómo vas a llevar esos zapatos?” dice. “Simplemente lo abordé como lo haría con cualquier otro papel. De manera que recorté sus logros dejando a un lado la perspectiva de su actuación –su capacidad de dominar el escenario, su canto, su ejecución del piano– y encontré un hombre muy complicado, tratando de descubrir su identidad. Eso sí era algo que yo sabía enfrentar. Si podía empezar ahí tendría las piezas iniciales que me brindarían la confianza necesaria para asumir todo lo demás”.

“Algo sobre Freddie Mercury que es indiscutible es su magnetismo”, prosigue Malek. “Sobre el escenario, con el micrófono en mano o sentado al piano, se siente capaza de todo. Su magia consistía en el intercambio con el público, en la capacidad de crear un espacio en el que a todos se les permitía sentir lo mismo. Podía llegar a ti como si fueras la única persona en el público y es precisamente ese intercambio lo que lo convierte en el artista más notable y revolucionario de nuestra época o de cualquier otra”.

Graham King coincide, “nadie era capaz de dominar al público como Freddie. Él sabía cómo ser esa persona sentada en la última fila. Pensaba en los marginados. Pensaba en los acosados. Pensaba en las personas que no podían permitirse una entrada al concierto. Y dio lo que recibió de sus raíces. Creo que nunca perdió de vista sus raíces y lo que significaban para él. Y creo que las canciones que creó eran parte de esa persona que decía, ‘sí, puede que sea el cantante, pero todos podemos cantar juntos. Todos podemos amarnos los unos a los otros. Todos podemos intentar llevarnos bien en este mundo’. Creo que eso significaba mucho para él”.

Para Malek, uno de los temas más importantes de la película es el sentido de la familia y cómo la familia protege y valora. Cuando contratan a Paul Prenter como asistente del representante de la banda, John Reid, la banda –la familia de Freddie– se divide. Prenter se gana la confianza de Mercury y le anima a dar rienda suelta a su hedonismo. También convence a Mercury de abandonar la banda y probar suerte en solitario en Alemania. “La banda percibe a Paul como astuto y conspirador”, dice Malek. “Llevó a Freddie por un camino de fiestas oscuras, clubes, drogas, y alcohol. Hizo falta una visita de Mary Austin, su persona más allegada, para que pudiera darse cuenta de que la gente con la que vivía en Múnich no eran su familia real y no tenían sus intereses como prioridad. Es entonces cuando comprende que ha perdido parte de sí mismo y que ha perdido a la banda. Se da cuenta de cuánto necesita a los chicos de la banda y cuánto la necesita a ella”.

Malek les agradece enormemente a Brian May y Roger Taylor su cooperación con la producción. “Contar con Brian y Roger fue crucial”, dice el actor. “Nadie conoce su historia y esta banda mejor que ellos dos, de ahí que su perspectiva sea invaluable. Además, nos dio confianza tenerlos a nuestro lado, animándonos. Saber que estaban ahí, observando, nos puso las pilas. Resulta muy difícil poner tu historia en manos de desconocidos, pero llegamos a conocerlos realmente, y había tal nivel de confianza que no que queríamos decepcionarles”.

Cuando llegó el momento de preparar las escenas de los conciertos en directo, Malek adoptó una postura poco habitual. “Supe que tendría que cantar, hacer un acento británico, moverme por todo el escenario, y supe que necesitaría un entrenador de movimiento”, dice. “Conocí a Polly Bennett y no perdimos tiempo. Inmediatamente nos pusimos a ello”.

Como entrenadora de movimiento, Bennett ayudó al actor a interpretar cómo se movía Freddie. “El movimiento no se limita a la actuación”, explica Bennett. “Es todo cuanto el personaje es y ha sido siempre”.

Bennett empezó por analizar el legado de Freddie Mercury, especialmente lo que ella denomina su legado gestual, en donde cada recuerdo de cómo surgió cada canción influiría sobre el modo de interpretarla.

“Rami y yo llevamos a cabo este proceso con todas las canciones para pensar sobre lo que le ocurría a Freddie antes de algún momento en particular, quiere decir que su físico adoptaría una forma específica. Seguimos todos los acontecimientos que le ocurrieron entre 1950 y 1985 cuando acaba la película para analizar el impacto en su físico”.

Bennett menciona que el hecho de haber sido boxeador, golfista y corredor de fondo en su infancia repercutió en los movimientos de Freddie durante toda su vida. “Puedes verlo lanzar puñetazos en sus actuaciones, observar cómo levanta las rodillas al correr o cómo usa el pie del micrófono como si fuera un palo de golf. Todo esto son muestras de su memoria muscular. Asimismo, creció en Zanzíbar con esa cultura específica, y esto se evidencia en sus adornos y los colores que viste. También notamos pequeños trucos que empleaba para disimular sus dientes, especialmente en los primeros años, y cómo pierde ese complejo a medida que madura y tiene más seguridad, abriendo más la boca al cantar y sonriendo en el escenario”.

Su investigación también resalta el amor de Freddie hacia Liza Minelli y la película ‘Cabaret’, su interés por el trabajo del director y coreógrafo Bob Fosse y su admiración por la ópera y sus divas glamorosas al igual que sus contemporáneos Mick Jagger y David Bowie. “Rami y yo trabajamos dándole un poco de forma de Bowie por aquí o Liza Minelli por allá en sus actuaciones a principios de los 70, lo cual desapareció a medida que empezó a aceptar su homosexualidad. Hay que recordar que la homosexualidad se despenalizó cuando él apenas tenía 20 años, y esto tendría un enorme impacto sobre su sentido del espacio personal y su actitud hacia los demás. Pero a medida que compone canciones y su fama crece, se vuelve más atrevido”.

Las escenas del Live Aid entrañaron sus propias complicaciones para Bennett, máxime porque se grabaron al inicio del rodaje. “Freddie actuó frente a ese numerosísimo público”, recuerda, “así que tuve que entrenar a Rami para que pudiera ser flexible, ágil y presente en el momento. Comenzamos a trabajar en ‘Radio Ga Ga’, y logró interiorizarlo todo en unas tres horas –cada mirada, cada giro, cada movimiento del micrófono. A partir de ahí, lo pilló todo muy rápido, y todo se volvió bastante fluido, orgánico y espontáneo, de manera que llenó el estadio y se dirigió a todos los allí presentes. El verdadero reto consistió en conseguir la resistencia física para continuar”.

Una de las escenas más divertidas para Bennett fue la actuación de “Killer Queen” en ‘Top of the Pops’. “Freddie se muestra muy extravagante en esta actuación”, dice. “Abrigos de piel, laca de uñas, anillos, adornos y melena. Es delgado y coqueto, con poses que rebosan elegancia y aplomo. Rami es todo lo contrario, así que se divirtió mucho explorando ese terreno. Freddie tampoco tenía la presión de cantarla en directo porque hizo playback, podía permitirse sobreactuar”.

La colaboración con Bennett resultó indispensable para Malek. En palabras del actor, “no queríamos imitar a Freddie sino más bien entender por qué hacía lo que hacía. Analizar a los artistas, películas y coreógrafos que lo influenciaron fue increíblemente útil para llegar a la esencia de cómo se movía y actuaba”.

La culminación de su arduo trabajo fueron las escenas del Live Aid. “Salir al escenario del Live Aid fue sensacional”, dice Malek. “Incluso cuando no había público me destrozaban los nervios. Pero también me daban energía. Gracias a que recrearon el escenario a la perfección daba la impresión de ser real”.

Dice Graham King, “no queríamos una imitación de Freddie. Queríamos que Rami aportara algo propio a la vez que recogía los icónicos movimientos de Freddie. Polly encontró un buen equilibrio. Lo ha hecho muy bien. Ella y Rami trabajaron mucho la creación del personaje. Rami ha hecho un trabajo increíble. Yo había visto Mr. Robot, pero no había visto sus otros trabajos, y la presión era máxima. Estamos hablando de una banda que cuenta con millones de seguidores que tenían muchas expectativas para esta película. ¿Podremos complacer a los fans de Queen? ¿Los acérrimos? Rami es increíble. Me siento orgulloso de decir que es una de las mejores actuaciones que he visto en mucho tiempo”.

Dirección: Bryan Singer.

Año: Estados Unidos, 2018.

Reparto: Rami Malek, Lucy Boynton, Gwilym Lee, Ben Hardy, Jow Mazzello, Aiden Gillen, Tom Hollander, Allen Leech, Aaron McCusker, Mike Myers.

Producción: Grahm Kingy Jim Beach.

Distribución: Hispano Foxfilm.

Estreno: 31 de octubre de 2018.

-Publicidad-

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.