El pasado 22 de mayo, tuvo lugar el VI Foro de Industrias Culturales, organizado por la Fundación Santillana y por la Fundación Alternativas, en el Auditorio del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. El Foro, bajo el título de “Europa, la excepcionalidad de la cultura”, tuvo cuatro mesas redondas dedicadas al tema de las Industrias Culturales en general.
De dichas mesas redondas, cabe hacer especial hincapié sobre la primera, en la que se esbozaron una serie de propuestas por parte de los distintos sectores de la cultura, para ser aplicadas por el nuevo Parlamento Europeo. Durante el Foro, Ramón Colom, presidente de FAPAE hizo mención a la igualdad de derechos de los productores españoles sobre la copia privada, para que éstos tengan los mismos derechos que los demás productores de la Unión Europea, dado que la regulación Española no se ajusta al Derecho Comunitario, que si se corresponde a la realidad industrial.
Así mismo, solicitó la aplicación efectiva de la Directiva de Servicios Audiovisuales, donde se dispone que el 51% de la cuota de emisión debe ser de contenido Europeo. En España no existe constancia de que se haya aplicado alguna sanción en base a ésta normativa, básicamente en el marco de la televisión pública. Con respecto a la piratería elevó una propuesta para que se utilice una parte de los ingresos de la copia privada, para el control y penalización de la piratería.
Juan Ramón Gómez Fabra, presidente de la Federación de Cines de España, propuso como punto de partida, tomar la regulación de la fiscalidad y las ayudas como una prioridad, estableciendo reglas nuevas de armonización, buscando un mundo sin fronteras, que provoca internet. Así establece la necesidad de que se disponga un programa europeo de educación audiovisual, y el fomento de los espacios naturales donde el producto se exhibe, como los teatros, el cine, etc.
Enrique González Macho, reelegido recientemente presidente de la Academia de cine, demanda que se aplique y se disponga el “Programa Media”, que establece el justo equilibrio entre las industrias cinematográficas débiles y fuertes, primando la realización de buenas películas, sin importar donde estas se realicen, sobre todo fomentando la coproducción, para que países pequeños puedan contar con industria cinematográfica. Y por último propone el fomento del cine Español y Europeo más allá de las fronteras comunitarias, y esto en base al fomento y regulación de las televisiones.
José Luís Acosta, presidente de la Sociedad General de Autores y Editores, solicitó que se incremente el estimulo de la cultura, entendiendo que en la cultura radica la potencialidad. En segundo lugar, que se armonice el marco legal de los derechos de autor, sobre todo en el mundo digital, y que en base a esto, se dispongan medidas contra la piratería. En tercer lugar, solicita la integración de los distribuidores de contenidos en la economía de la creación. Y por último, que se adopte una fiscalidad reducida para el sector cultural a nivel Europeo.
Por su parte, Francisco García Novell, miembro de la Junta Directiva de la Academia de Ciencias y las Artes de Televisión, abogó por una televisión de calidad, al servicio de la cultura, digna y responsable. “La televisión debe ser utilizada para divulgar la riqueza cultural de los países de Europa, y en base a ello lograr que la cultura sea un bien de primer orden, que suscite el interés de los ciudadanos, sobre todo para niños y jóvenes. Hay que apostar por una alfabetización mediática que proporcione las claves necesarias para que se evalúen los medios de comunicación y los contenidos que llegan a partir de los diferentes medios de comunicación, para poder comprometerse con la sociedad plural y promover el diálogo intercultural”.
Por último, Carlota Navarrete, directora de Coalición de Creadores e Industrias de Contenido, comentó que a nivel Europeo, se debe mejorar todo el marco legislativo de la propiedad intelectual, sobre todo en el área digital. Se requiere una actualización de la Directiva de Protección de Datos, que de una nueva concepción de la neutralidad en la red, que habilite una lucha eficaz contra la piratería. Entiende fundamental una concienciación en la educación básica y universitaria sobre la protección de los derechos de propiedad intelectual y la lucha contra la piratería. Así como la generación de un Observatorio Europeo de la Piratería, que vaya haciendo una recopilación sistemática de los abusos.
