Un Festival de Málaga sobre una base industrial sólida

El Festival de Málaga ha iniciado el evento central de sus actividades de industria, esto es, la primera edición celebrada en el marco del certamen de los Spanish Screenings – Málaga de  Cine. En la presentación del mercado de cine español impulsado por FAPAE han participado representantes de las principales instituciones patrocinadoras, cuyas intervenciones han precedido a la apertura del Foro de Coproducción – Uruguay Audiovisual.

Entre estas instituciones estaba la Junta de Andalucía, representada por su Secretario General de Cultura, Eduardo Tamarit, que además de destacar la importancia de que los Spanish Screenings se celebren en territorio andaluz, en el marco del Festival de Málaga, ha aprovechado para reprochar a TVE que entre los títulos adquiridos la pasada semana no hubiera ninguna película andaluza: «Nos ha sorprendido que no hubiera ningún proyecto andaluz entre los elegidos por TVE. No sé si la televisión pública está tomando el camino de las privadas, pero lo único que podemos decir es que vamos a apoyar al cine andaluz y no vamos a permanecer impasibles», ha afirmado.

El secretario de Cultura de la Junta de Andalucía ha anunciado además que el próximo noviembre patrocinarán también la segunda edición de los Screenings de televisión organizados durante el Festival de Cine Europeo de Sevilla. Tamarit ha adelantado que este año este mercado televisivo sevillano se llevará a cabo en la sede de Caixa Forum de la capital andaluza.

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El director del Festival de Málaga, Juan Antonio Vigar, ha coincidido en resaltar la importancia de los Spanish Screenings para la ciudad de Málaga y el festival: «Mantuvimos la ilusión de contar con un mercado cinematográfico y este es un regreso muy necesario para nosotros. Siempre tuve la certeza de que el talento del cine tiraría de la industria y así ha sido, ahora la palabra negocio no debe ser ajena a nosotros. No concibo un Festival de Málaga sin una base industrial sólida», ha declarado.

Por su parte, el presidente de la confederación de productores, Ramón Colom, se ha referido al Festival de Málaga como «el más próximo», para asegurar que en su opinión «el futuro del cine español pasa por un mercado internacional del cine «en español» como el instaurado ahora en Málaga. En este acto de inauguración oficial, la organización del Festival de Málaga ha reconocido con un premio a FAPAE, que celebra en 2017 el vigésimo aniversario de su creación, «por su apoyo al certamen y al cine español».

Tras la presentación institucional del Málaga de Cine, se ha iniciado la primera jornada del  Foro de Coproducción – Uruguay Audiovisual, que se celebra en colaboración con el ICAU (Dirección del Cine y Audiovisual Nacional de Uruguay), entre los días 19 y 21 de marzo en el Salón Gran Fórum AC Hotel Málaga Palacio. El Foro pretende ser un lugar de encuentro entre las dos orillas, y consta de charlas y conferencias, proyecciones, pitchings de proyectos, así como reuniones cara a cara en un espacio destinado a la confluencia, la coproducción, y el networking.

En las dos últimas décadas el cine uruguayo ha pasado de no tener prácticamente producción a contar con una producción consolidada anual, gracias a las políticas institucionales y la tenacidad de los creadores y productores. En 2008 se publicó una Ley de cine y se crearon varios fondos para impulsar la producción nacional, fondos que están abiertos también a las coproducciones. «Hace 25 años el cine uruguayo era prácticamente inexistente, incluso no se podía certificar que una película uruguaya porque no estaba previsto legalmene», reconoció  la productora uruguaya de Tornasol Films, Mariela Besuievsky, que ha apuntado también a la importancia del programa Ibermedia en estos años en el impulso de las coproducciones iberoamericanas.

Sin embargo, Besuievsky ha lamentado que España haya perdido peso también en los últimos tiempos en dichas coproducciones iberoamericanas, debido a un momento difícil debido fundamentalmente al cambio normativo del pasado año y a la crisis económica. «Espero que España recupere su espacio pronto», ha dicho la productora que a su vez ha instado a los productores uruguayos a acometer producciones más ambiciosas que permitan tanto ganar público en el mercado interior como viajar fuera de Uruguay con mejores expectativas.

El el foro de presentarán cuatro proyectos, tres largometrajes de ficción y un documental. Los filmes de ficción son: ‘El ojo de la luna’, de Leonardo García, producida por Muchacha Films, que cuenta la historia de Carlitos tiene diez años y vive en el barrio El Cerro durante la década del setenta con su abuela, ya que los padres de Carlitos han desaparecido. Un día llega Cristina, vecina y amiga de Carlos y se queda a vivir con ellos. Entre juegos y convivencia, los niños se refugian en el sótano de la casa y comienzan a trabajar en un proyecto desconocido, que mantienen en secreto. Este misterioso proyecto da lugar a una travesura, cuyos resultados desastrosos acabarán convirtiendo el juego en tragedia, involucrando detención de inocentes y una persecución por parte del gobierno. Finalmente serán los propios Carlitos y Cristina quienes decidirán actuar para evitar tanta injusticia.

‘La otra Ana’, de Carlos Ceacero, producido por Raccord Films. El filme cuenta con un guion de Carlos Ceacero y Nicolás Ciganda, basado en la novela del escritor uruguayo Juan Carlos Mondragón. En la película, a veces Ana, casada y con un hijo pequeño, fantasea con la posibilidad de empezar una nueva vida…

‘Variaciones de Koch’ es el tercer proyecto de ficción. Está dirigido por Julián Goyoaga y producido por Raindogs Cine. El protagonista es Koch. Pero, ¿quién es Koch? ¿El turista desprevenido, el marido infértil, el exitoso ejecutivo o el padre enfermo y receloso? Todos y cada uno. Si las variaciones suelen serlo sobre un mismo tema, esta película explora una y otra vez las relaciones humanas, que pueden fácilmente ser ganadas por la indiferencia, el desgaste y la incertidumbre.

El documental es ‘Gardel en Barcelona’, de Ricardo Casas, producido por La Compañía del Cine, Welt Film, Kristina Konrad. Carlos Gardel llega a Barcelona en 1925 con la intención de ganar al público europeo y lo consigue. Esa cabecera de puente con el viejo continente le permite tejer una red de vínculos y presentaciones que lo llevan al éxito. El registro de las sucesivas visitas a la ciudad condal son bien interesantes de conocer.

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